El obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez, regresó recientemente a la diócesis luego de un intenso viaje pastoral por Europa, que incluyó un encuentro personal con el Papa León XIV y diversas reuniones en Alemania, Italia y España vinculadas con proyectos diocesanos y educativos. De vuelta en la diócesis, compartió en Radio Tupambaé sus reflexiones sobre la experiencia. Comentó que pudo visitar la Basílica Santa María La Mayor donde se encuentra enterrado el Papa Francisco y rezar allí. Volvió a remarcar que el Papa León tendría pensado visitar América Latina el año próximo.
Durante la charla, Mons. Martínez expresó su preocupación por los bajos niveles de participación electoral que se vienen registrando en la Argentina y exhortó a los votantes a comprometerse activamente con la vida democrática. “El sistema democrático no es blanco o negro. Tenemos que madurar mucho para vivirlo plenamente. La democracia se fortalece con la participación y la elección consciente”, subrayó.
El obispo insistió en que el voto es una herramienta de transformación y no debe utilizarse desde el enojo o la indiferencia. “No podemos elegir a la bartola. Tenemos que conocer a quién votamos, porque en definitiva, los que están es porque nosotros los elegimos o porque nos ausentamos. El voto es un acto de responsabilidad ciudadana y también de fe”, sostuvo.
Llamado a la reflexión y compromiso ciudadano
Monseñor Juan Rubén Martínez recordó el reciente mensaje difundido por el Secretariado Nacional para los Laicos, dependiente de la Comisión Episcopal para la Vida, los Laicos, la Familia y la Juventud, que insta a reflexionar sobre el modo en que los creyentes participan en la construcción de la democracia. “La Iglesia enseña que la participación política es una forma de servir y construir una comunidad más justa y solidaria. Debemos asumir nuestro rol ciudadano con compromiso y esperanza”, remarcó.
El obispo también señaló que el clima cultural actual “está impregnado de desconfianza y cansancio hacia la política y sus actores”, aunque aclaró que ese desencanto no debe convertirse en abstención. “Aun cuando uno crea que su voto pesa poco, cada participación incide. Hay personas mayores, incluso en sillas de ruedas, que hacen un esfuerzo enorme para ir a votar. Ojalá todos tengamos esa misma convicción”, manifestó.
Crítica a la dirigencia política y ejemplo internacional
En su análisis, Mons. Martínez cuestionó la falta de madurez en gran parte de la dirigencia argentina y contrastó su conducta con la de líderes de otros países. “Escuchaba al presidente francés Emmanuel Macron hablar sobre la justicia y la democracia con una altura y una dignidad admirables. Qué ganas de tener dirigentes así, con madurez democrática, sin insultos ni rotulaciones. En nuestro país, lamentablemente, vivimos de un extremo al otro, sin equilibrio ni reflexión”, expresó con preocupación.
Asimismo, lamentó que la política nacional esté marcada por el cortoplacismo y los conflictos internos: “Vivimos a los papilotazos, de un lado para el otro. La Argentina tiene muchísima gente capaz, pero muchas veces no son los que llegan a ocupar espacios de decisión. Meternos en un ámbito de violencia o locura no conduce a nada”, reflexionó.
También, advirtió sobre la baja asistencia a las urnas en los últimos comicios y remarcó que ser ciudadano responsable forma parte de la vivencia cristiana: “Nos decimos cristianos, hablamos de santidad, pero la santidad también pasa por ser ciudadanos responsables cuando vamos a votar”, enfatizó
Federalismo y madurez institucional
Otro de los puntos que el obispo Martínez destacó fue la necesidad de fortalecer el federalismo y el respeto institucional. “Somos federales solo de nombre, muchas veces. Las provincias deben velar por sus intereses y participar más activamente en las decisiones nacionales. No puede ser que todo dependa de una sola persona o de decisiones unilaterales”, afirmó.
El obispo consideró que la educación cumple un rol fundamental para formar ciudadanos responsables: “La educación puede ayudarnos a ser mejores ciudadanos. Si queremos una Argentina más justa, debemos comenzar por ejercer nuestro voto con conciencia”, señaló.
Durante su estancia en Europa, Mons. Martínez mantuvo encuentros en Alemania relacionados con proyectos pastorales y en España con representantes de la Universidad Católica de las Misiones (UCAMI) para fortalecer vínculos académicos y promover intercambios.
Fe, ciudadanía y esperanza
Además, Mons. Martínez vinculó el compromiso cívico con la vivencia cristiana: “Nos decimos cristianos, hablamos de santidad, pero la santidad también pasa por ser ciudadanos responsables cuando vamos a votar. Dios nos llama a comprometernos con nuestra patria, no desde la indiferencia, sino desde el servicio”.
Consultado sobre una posible visita del Papa León XIV a la Argentina, el obispo comentó: “Creo que va a venir. Está planificando viajes a Turquía y Líbano, pero también se habla de la posibilidad de que visite nuestro país”.
El recuerdo de San Juan Pablo II

Al cierre del diálogo, el obispo dedicó unas palabras a San Juan Pablo II, una figura especialmente significativa en su vida. “Fue mi Papa. En su pontificado fui ordenado sacerdote, y luego él me ordenó obispo en Reconquista y me envió a Posadas. Un hombre de Dios que supo dialogar con el mundo y acompañar desde el Evangelio las situaciones más difíciles”, recordó con emoción.
Mons. Martínez añadió que suele rezarle al santo polaco y pedirle su intercesión: “Voy y me siento frente a su monumento. Le hablo, le pido por la diócesis, por el país. Él fue un pastor que marcó una época”.
El obispo también recordó que cada 22 se celebra a Santa Rita, patrona de los imposibles, e invitó a encomendarle las intenciones de los argentinos: “Le pedimos que nos ayude, porque los argentinos también somos un poco imposibles. Pero seguimos poniendo el corazón”, concluyó con humor y esperanza.


