En un domingo que quedará marcado en la historia del fútbol argentino, Deportivo Riestra sorprendió y venció 2-1 a River Plate en el Monumental, dejando en evidencia todas las falencias del equipo de Marcelo Gallardo. El estadio estuvo lleno con 85.018 espectadores, que despidieron al Millonario con una estruendosa silbatina.
El partido comenzó con el gol de Antony Alonso para Riestra a los 12 minutos, mientras que Giuliano Galoppo igualó para River a los 25. Sin embargo, la alegría millonaria duró poco: Pedro Ramírez marcó el segundo tanto para el equipo del ascenso a los 51 minutos del segundo tiempo, desatando el festejo histórico de Riestra. A los 35 minutos del complemento, Maxi Salas recibió roja directa, reflejo de la frustración del local.
River sufrió además con un gol anulado a Borja por offside y con su incapacidad para generar juego, pese a los intentos aislados de Quintero. La defensa cometió errores clave, con Martínez Quarta y Bustos como protagonistas, mientras que la ofensiva de Borja y Castaño no pesó en el marcador. Con solo 17% de posesión, el Millonario quedó expuesto ante un Riestra que supo aprovechar cada descuido.
La derrota llega luego de la eliminación en la Copa Libertadores frente a Palmeiras y a cuatro días de un partido clave contra Racing por la Copa Argentina. Con este resultado, River acumula cuatro derrotas consecutivas, algo que no sucedía desde 2010, y ve en riesgo su clasificación a la Libertadores 2026.
Por su parte, Riestra celebró un triunfo histórico, ejecutando un plan táctico perfecto que capitalizó los errores del local y dejó al Monumental en un ambiente de incredulidad y descontento.

