Durante la mañana del segundo día de la 126ª Asamblea Plenaria, los obispos se reunieron en grupos organizados según sus años de ordenación episcopal. El trabajo estuvo centrado en una reflexión compartida sobre el legado del Papa Francisco, su impacto en la vida de la Iglesia en Argentina y los desafíos pastorales que su testimonio inspira para el futuro.
En un clima de comunión y gratitud, los obispos compartieron miradas, experiencias y sentimientos, reconociendo en la figura de Francisco una guía para seguir caminando junto al Santo Pueblo Fiel de Dios.