La volatilidad global, alimentada por la creciente incertidumbre económica internacional, se reflejó este lunes en una nueva caída de las principales variables financieras de Argentina. Los mercados bursátiles, que atraviesan su tercera jornada consecutiva de caídas debido a la guerra de aranceles entre Estados Unidos y China, golpearon con fuerza a las acciones y bonos argentinos, mientras que la cotización del dólar alcanzó nuevos máximos y las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) cayeron por debajo de los 25.000 millones de dólares.
Caída de los activos argentinos
Los papeles argentinos, que cotizan en Wall Street bajo la forma de ADRs, fueron los más afectados, perdiendo hasta un 7% de su valor. Las fluctuaciones fueron intensas, especialmente durante las primeras horas de negociación, cuando los activos argentinos cayeron más del 8%. Entre los más perjudicados estuvieron las acciones de Corporación América, Grupo Galicia, Banco Francés y Ternium. Si bien hubo una breve recuperación a mediodía, impulsada por rumores sobre una posible suspensión de los aranceles impuestos por Estados Unidos, la desmentida de la Casa Blanca llevó nuevamente a los activos a terreno negativo, cerrando con pérdidas significativas.
En la Bolsa local, el índice S&P Merval sufrió una baja del 3,9%, cerrando en los 2.025.967 puntos, su nivel más bajo desde noviembre de 2024. Los bonos Globales y Bonares también retrocedieron un 3,7%, mientras que el riesgo país, medido por el índice JP Morgan, subió 61 puntos, alcanzando los 979 puntos básicos.
El impacto del conflicto comercial
La guerra comercial entre Estados Unidos y China sigue alimentando la incertidumbre global, con fuertes repercusiones en los mercados financieros. Según Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, la caída de los bonos argentinos en dólares refleja una doble presión: la volatilidad internacional generada por los aranceles y las dudas persistentes sobre el acuerdo de Argentina con el FMI. Este panorama podría dificultar aún más la acumulación de reservas y las expectativas sobre el esquema cambiario del país.
El impacto de los aranceles también se ha notado en los precios de las materias primas, particularmente en el oro y el petróleo, cuyas caídas contribuyeron a la disminución de las reservas internacionales del BCRA. Según fuentes del banco central, la caída de la cotización del yuan chino y el oro resultaron en una pérdida de más de 300 millones de dólares en reservas, que descendieron a un total de 24.791 millones de dólares, el nivel más bajo en más de un año.
El dólar sigue en ascenso
En el mercado cambiario, el dólar libre alcanzó un nuevo máximo, subiendo 35 pesos (2,7%) para cerrar en 1.345 pesos, el precio más alto desde el 26 de agosto de 2024. En lo que va del año, la moneda estadounidense ha subido un 9,3%, superando el ritmo de la inflación. En paralelo, el dólar MEP y el contado con liquidación también marcaron nuevos picos, situándose en torno a los 1.362 pesos.
A pesar de estas subidas, el dólar mayorista se mantuvo sin cambios, a 1.076 pesos, lo que expandió la brecha cambiaria a un 25%, la más amplia desde octubre de 2024. Para mitigar la presión, el BCRA intervino en el mercado de cambios, vendiendo 35 millones de dólares.
Desafíos para el gobierno y el FMI
Frente a este complicado panorama, el gobierno argentino se mantiene firme en su estrategia económica, confiando en que el acuerdo con el FMI de 20.000 millones de dólares continuará siendo un pilar clave para la estabilidad del país. Sin embargo, los analistas alertan sobre los riesgos que podrían derivarse de la creciente tensión comercial global. Eduardo Levy Yeyati, asesor económico de Adcap Grupo Financiero, advirtió que el impacto de las políticas proteccionistas de Trump podría tener efectos económicos y financieros devastadores no solo para Argentina, sino para toda América Latina.
En este contexto, la clave será cómo Argentina maneja la relación con los mercados internacionales de deuda y cómo se ajusta su esquema cambiario a las nuevas realidades globales. Como señala Juan Manuel Franco, el futuro dependerá de cómo se afecten los flujos de exportación y si el acuerdo con el FMI puede sostener la acumulación de reservas en un escenario global tan incierto.
La incertidumbre persiste
Mientras tanto, los mercados globales siguen siendo un terreno volátil. En Wall Street, el Nasdaq cerró con una leve ganancia del 0,1%, tras una caída inicial del 4%, mientras que el Dow Jones perdió un 1,9%. En Asia, los mercados de Tokio y Shanghái también registraron fuertes pérdidas, reflejando el temor a una recesión global.
En este contexto, los analistas de Portfolio Personal Inversiones destacan que la guerra de aranceles podría generar distorsiones en los precios internacionales, afectando tanto la economía global como la argentina. A pesar de los esfuerzos de Trump para fortalecer la economía estadounidense, los mercados parecen anticipar una crisis financiera que podría arrastrar a todos los países en desarrollo, incluido Argentina.
Con la incertidumbre global en aumento y los riesgos económicos internos, el gobierno argentino enfrenta uno de los momentos más complejos de su gestión, con un panorama que dependerá de las decisiones internacionales y locales en los próximos meses. Infobae