Cristina Kirchner asume la presidencia del PJ en medio de tensiones internas y demandas de renovación


El martes, la ex mandataria Cristina Fernández de Kirchner fue proclamada presidenta del Partido Justicialista (PJ) por resolución de la jueza María Servini, quien avaló únicamente la lista “Primero la Patria”, liderada por Fernández de Kirchner. La proclamación, llevada a cabo en la sede del PJ, ocurre en un contexto de debate interno dentro del peronismo, donde dirigentes cuestionan tanto el estilo como el liderazgo de la expresidente. La lista impulsada por el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, fue rechazada, lo que motivó al dirigente a lanzar una corriente interna llamada “Federales”.

La resolución de la Junta Electoral del PJ, pendiente de ratificación definitiva por la jueza Servini, establece que se debe “proclamar a la lista de candidatos y candidatas encabezada por la Cra. Cristina Fernández de Kirchner, denominada ‘Primero La Patria’”. No obstante, la decisión generó controversia, ya que sectores críticos dentro del partido señalan una falta de apertura en el proceso. La exsenadora María Eugenia Catalfamo, representante de San Luis en la Junta, fue la única en firmar en disidencia, cuestionando la ausencia de participación juvenil en el partido. “No creo en la caída del Peronismo, pero sí en su desgaste por ambiciones personales o de un grupo que no nos representa a todos. Los jóvenes buscamos una política distinta, de escuchar, hacer y cumplir”, declaró Catalfamo.

Quintela y la fundación de “Federales”

Previo a la proclamación, Quintela, junto a su equipo de trabajo, lanzó la corriente interna “Federales” como una respuesta a la imposibilidad de competir en la elección interna. Esta nueva línea dentro del PJ promueve un peronismo federal, inclusivo y adaptado a las demandas de la sociedad actual. En un comunicado, los dirigentes de “Federales” expresaron su visión de un partido que “no solo responde a las necesidades del presente, sino que anticipa el futuro, construyendo un mundo donde todos tienen un lugar, una voz y un propósito”.

El grupo también manifestó su rechazo a la decisión judicial que invalidó su participación en la contienda, señalando que “es falso no haber conseguido los avales requeridos; los mismos se entregaron en cantidad suficiente, con recepción aceptada y ante múltiples testigos”. Asimismo, Quintela y sus aliados subrayaron la importancia de democratizar el PJ y de promover una mayor participación de los afiliados en el debate interno y en la vida partidaria.

Un liderazgo bajo escrutinio

Cristina Kirchner asume la presidencia del PJ en un momento de gran desafío para el peronismo, que intenta reorganizarse tras la derrota electoral de 2023 y se prepara para las elecciones de 2025. Sin embargo, su liderazgo es cuestionado por algunos sectores que consideran que la expresidente prioriza intereses personales, lo cual dificulta la unidad interna. Sin mencionarla directamente, “Federales” criticó lo que consideran una parcialidad en favor de su hijo, Máximo Kirchner, en su disputa de liderazgo con el gobernador bonaerense Axel Kicillof.

El comunicado de “Federales” apuntó además a la necesidad de un peronismo “fuerte y convocante” para enfrentar el avance de fuerzas opositoras, especialmente en un escenario político cambiante. “Para frenar a Milei precisamos un peronismo fuerte y convocante”, planteó la corriente, advirtiendo sobre la urgencia de ampliar las bases del partido para evitar futuras derrotas. “No se logra con consignas fuertemente gritadas y escasamente consolidadas en prácticas concretas. El peronismo enfrenta la necesidad, histórica, de enamorar nuevamente. Si no ampliamos, repetiremos derrotas”.

Un PJ fragmentado en busca de renovación

Cristina Kirchner, la segunda mujer en asumir la presidencia del PJ, enfrenta un partido fragmentado con sectores que exigen renovación y mayor representatividad federal. Su liderazgo deberá abordar estas tensiones internas, especialmente con agrupaciones como “Federales”, que reclaman una mayor apertura y equidad en la toma de decisiones del partido. La ex mandataria se encuentra ante el desafío de revitalizar al peronismo y de posicionarlo como una opción fuerte y unificada para las próximas elecciones, en un contexto de reconfiguración del panorama político argentino.