El desarrollo de la tecnología ha traído consigo un incremento alarmante en las estafas cibernéticas, especialmente en transacciones no autorizadas. La Dirección de Defensa del Consumidor ha registrado un aumento significativo en los reclamos relacionados con transferencias bancarias y préstamos falsos, lo que pone de relieve la vulnerabilidad de los usuarios ante el delito digital.
Con el avance de las tecnologías de pago y compra electrónica, las estafas cibernéticas han evolucionado y proliferado, generando serias preocupaciones entre los consumidores. Según la Dirección de Defensa del Consumidor, el número de denuncias ha aumentado considerablemente, con usuarios reportando operaciones que no han autorizado, como transferencias y préstamos.
En una entrevista con Acá te lo Contamos por Radioactiva 100.7, Alejandro Garzón Maceda, director de la entidad, enfatizó la importancia de la seguridad en las plataformas bancarias. Afirmó que, tras la pandemia, el auge de los pagos electrónicos ha permitido que los datos de los usuarios circulen por la red, facilitando las acciones de los ciberdelincuentes.
“El avance tecnológico ha hecho que nuestras informaciones estén expuestas. La seguridad de esos datos depende no solo de nosotros, sino también de los proveedores de servicios”, declaró Garzón Maceda.
Los delincuentes cibernéticos, al aprovechar la información personal disponible en línea, realizan operaciones fraudulentas, desde préstamos hasta transferencias bancarias. Garzón Maceda explicó que, mientras que inicialmente las estafas se centraban en compras no autorizadas en tarjetas de crédito, ahora los usuarios se enfrentan a la realidad de préstamos y transferencias realizadas sin su consentimiento, a menudo en otras provincias.
“Los ciberdelincuentes utilizan tácticas como el hackeo de WhatsApp, haciéndose pasar por conocidos para solicitar dinero de manera urgente. Esto puede parecer insignificante si se pide un monto pequeño, pero la suma total puede ser considerable al contactar a múltiples personas”, advirtió.
Reclamos y procedimientos para los consumidores
Ante la preocupación de quienes han sido víctimas de estas estafas, surge la pregunta: ¿deben pagar por operaciones que no realizaron? Garzón Maceda aclaró que la respuesta es un rotundo “no”.
“Si el consumidor no realizó la operación, lo primero que debe hacer es denunciar a la entidad correspondiente. Si la situación no se resuelve, debe acudir a Defensa del Consumidor con la documentación pertinente”, explicó.
El director también destacó que el sistema financiero en Argentina se divide en regulado y no regulado, lo que impacta en la seguridad de las transacciones. Las tarjetas virtuales, que no pertenecen a bancos regulados, tienden a tener menos medidas de seguridad, lo que las convierte en un blanco más fácil para los estafadores.
“Las entidades bancarias tienen protocolos de seguridad más rigurosos, aunque pueden resultar engorrosos, son esenciales para prevenir fraudes”, concluyó Garzón Maceda.
Las autoridades instan a los consumidores a estar alertas y a adoptar medidas de seguridad para proteger su información personal ante la creciente amenaza de las estafas cibernéticas. El Territorio