Andy Murray se retirará del tenis después de los Juegos Olímpicos de París 2024: Antes buscará su tercer oro


El tenista británico Andy Murray ha anunciado que pondrá fin a su ilustre carrera profesional tras los Juegos Olímpicos de París 2024. Con 37 años y tras años de desafíos físicos, el ex número uno del mundo se prepara para una última actuación en el escenario olímpico, donde buscará conquistar su tercera medalla de oro.

En un emotivo mensaje en sus redes sociales, Murray expresó: “Estoy en París para mi último torneo de tenis. Competir por el equipo de Gran Bretaña ha sido, sin duda, la semana más memorable de mi carrera y me siento muy orgulloso de poder hacerlo una última vez.” Su decisión llega después de un período de rehabilitación que incluyó una cirugía por un quiste espinal y una prótesis de cadera implantada en 2019.

Murray, conocido por su perseverancia y habilidad en la cancha, competirá en la modalidad de dobles junto a su compatriota Dan Evans en los Juegos Olímpicos de 2024. Además, disputará el cuadro individual, donde buscará ampliar su legado como el único hombre en ganar dos medallas de oro individuales en los Juegos Olímpicos, logradas en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.

En una reciente entrevista con la revista HELLO!, Murray reveló sus planes futuros: “Sin duda, seguiré jugando al tenis, pero no en el circuito profesional. Planeo dedicarme mucho más al golf y probablemente continuaré trabajando con mi entrenador de fuerza y acondicionamiento, Matt Little.”

Murray, que debutó en el top 10 del ATP Tour en 2007 y tuvo su primera experiencia olímpica en Pekín 2008, ha sido una figura prominente en el tenis mundial durante casi dos décadas. Además de sus hazañas deportivas, ha mostrado un fuerte compromiso con su comunidad, rechazando ofertas lucrativas para entrenar a jóvenes en Escocia y desarrollando su interés en los negocios. Su fortuna incluye 50 millones de libras en premios y una empresa principal, 77 Management Limited, valorada en 21,4 millones de libras.

En lo personal, Murray vive con su esposa Kim y sus cuatro hijos en una mansión en Leatherhead, Surrey, equipada con lujosas instalaciones. Con su retiro, el mundo del tenis se despide de uno de sus grandes campeones, cuya influencia y legado trascenderán mucho más allá de las canchas.