El Ministerio de Economía de la Nación ha oficializado una reforma al Impuesto a las Ganancias, ahora renombrado como Impuesto a los Bienes Personales, mediante la publicación en el Boletín Oficial del Decreto 652/2024. Según los cálculos de la Casa Rosada, esta medida aportará cerca del 0,4% del PBI en ingresos, necesarios para reforzar el equilibrio fiscal del país. Este ajuste se implementa en un momento crítico en el que el resultado de las cuentas públicas cobra mayor relevancia, ya que el Tesoro comenzará a pagar desde este lunes los intereses de las Letras Fiscales que reemplazarán a los pases del Banco Central.
El decreto establece que se mantendrá la baja del piso a $1,8 millón para solteros (aproximadamente $1.5 millón netos) y $2,2 millones para personas con dos hijos ($1,95 millón netos), tal como fue votado con la Ley Bases en el Congreso de la Nación. Estas nuevas cifras comenzarán a regir en julio, afectando los salarios que los trabajadores recibirán en los primeros días de agosto.
Anteriormente, el mínimo no imponible se ubicaba en 15 salarios mínimos, equivalentes a $2.340.000 hasta junio y $3.5 millones a partir de julio. Con esta medida, aproximadamente un millón de trabajadores que hasta ahora estaban exentos comenzarán a pagar el impuesto en alícuotas que varían entre el 5% y el 35%.
Los nuevos valores de pago irán desde $3.000 mensuales hasta $60.000 mensuales para aquellos que estaban exentos, superando los $100.000 mensuales para quienes ganan más de $2.500.000 brutos. Además, los pagos recibidos por los trabajadores en conceptos como horas extras, aguinaldo, viáticos de larga distancia (para camioneros) y zona patagónica, serán incluidos en el cálculo del impuesto.
La actualización del mínimo no imponible se realizará de forma trimestral durante el 2024, y luego de manera semestral a partir del Índice de Precios al Consumidor (IPC). El Territorio