El Ministerio de Economía confirmó que en julio se pagará un nuevo bono de $70.000 a jubilados y pensionados, una medida que se espera sea oficializada en los próximos días a través del Boletín Oficial. Este bono, que ha sido otorgado desde marzo, busca reforzar los ingresos del sector.
Contexto y detalles del bono
La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) ha estado entregando este bono durante cuatro meses consecutivos. Según el Instituto para el Desarrollo Social Argentino, en junio de 2024 el haber medio, incluyendo el bono, se encuentra un 37% por debajo del nivel registrado en 2017. El aumento promedio de este mes será de hasta un 3.2%.
Con el bono de $70.000, la jubilación mínima ascenderá a $285.622,21, mientras que la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) se situará en aproximadamente $242.400. Cabe destacar que las jubilaciones y pensiones aumentarán un 4.2% este mes, conforme al índice de inflación de mayo reportado por el INDEC. Sin embargo, el aumento efectivo final para los haberes mínimos será menor, oscilando entre el 2,83% y el 3,2%, debido a que el bono de $70.000 no experimentará actualización alguna.
Además, a partir de julio, los valores de las asignaciones familiares, como la Asignación Universal por Hijo (AUH) y el salario familiar para asalariados registrados y monotributistas, también se ajustarán por inflación.
Desgaste del Haber Mínimo
Una de las críticas recurrentes hacia estos bonos es la falta de actualización de su monto y la exclusión de estos como parte integral de los haberes, lo que resulta en un menor aumento proporcional de la jubilación mínima. Los bonos comenzaron a otorgarse en 2021 y han continuado sin interrupciones, incluso después de cambios de gestión, para compensar los efectos de las modificaciones en la fórmula previsional. En junio, la jubilación mínima sin bono fue de $206.931. Sin el bono de $70.000, aproximadamente 5 millones de jubilados no alcanzarían a cubrir la canasta básica total.
El economista Nadin Argañaraz indicó que hasta abril, los jubilados que cobran la mínima tuvieron una pérdida del 24% en sus haberes, y el resto, una pérdida del 37%. En solo cuatro meses, esta disminución fue comparable a la pérdida del 20% sufrida por las jubilaciones mínimas durante los cuatro años de gestión de Mauricio Macri. Durante la administración de Alberto Fernández, las jubilaciones mínimas cayeron un promedio del 2%, mientras que los haberes superiores experimentaron una mayor caída, entre el 25% y el 35%.
La confirmación del pago del bono de $70.000 en julio es un intento por parte del gobierno de mitigar la erosión del poder adquisitivo de los jubilados y pensionados, aunque persisten críticas sobre la sostenibilidad y la efectividad de estas medidas en el largo plazo. MOL