El lunes feriado no resultó ser un día de descanso para la parroquia Santa Catalina de Posadas, que lamentablemente sufrió un episodio de robo y vandalismo. Según relató el Padre Oscar Rojas, párroco de Santa Catalina, a Radio Tupa Mbae, desconocidos irrumpieron en el recinto durante la siesta, forzaron cerraduras y ocasionaron destrozos significativos, incluyendo la pérdida de una guitarra que se utilizaba para las misas.
El Padre Rojas mencionó que se están implementando medidas como cambiar cerraduras y mejorar la seguridad con cámaras. Asimismo, destacó la solidaridad comunitaria en la protección del lugar de culto, enfatizando la importancia de mantener la seguridad para la comunidad parroquial y preservar la tranquilidad durante los actos litúrgicos.
“Recorrieron distintos lugares, el colegio secundario, la primaria y pasaron al templo parroquial; cruzaron la puerta de entrada del templo, rompieron la puerta de la sacristía y ahí causaron destrozos. Se llevaron una guitarra que había dejado una chica que canta, para animar la misa en la liturgia del domingo pasado por el mal tiempo, por la lluvia, dejó ahí para guardar”, lamentó el Padre Rojas.
El incidente no solo incluyó el robo de una guitarra, sino también el vandalismo en varias áreas de la parroquia. “Más que nada en la puerta de entrada, rompieron la puerta de la secretaría, y ahí hicieron un desparramo de cosas. Buscaban dinero, también intentaron violentar la puerta al sagrario, gracias a Dios que no pudieron”, explicó el párroco.
A pesar de las sospechas de la participación de al menos dos individuos, aún no hay información oficial sobre posibles arrestos. “No sé nada. Me comentaban que habían detenido, pero no tengo información cierta. La policía no me dijo nada”, agregó el Padre Rojas.
Ante la necesidad de mejorar la seguridad, la parroquia ha tomado medidas inmediatas. “Estamos arreglando, ya da poco. Cambiamos la cerradura, arreglamos provisoriamente, a usar esta puerta. Y después también vamos a poner campaña de activar la cámara de seguridad”, aseguró el párroco.
Este incidente marca la primera vez desde que el Padre Rojas asumió como párroco hace casi un año que enfrentan un robo de esta magnitud. “Es la primera vez desde que estoy aquí”, confirmó.
En un llamado a la comunidad, el Padre Rojas expresó: “En todo caso, vamos a rezar en la misa, a pedir por el sagrario, por la profanación en un lugar sagrado. Para nosotros, el mayor tesoro que tenemos los católicos es la presencia real de Cristo en la Eucaristía”.
El Padre Rojas, quien anteriormente estuvo en Apóstoles durante dos años y medio, describió la adaptación a Santa Catalina como un proceso continuo. “Estamos acomodándonos, adaptándonos de a poco, como veníamos trabajando en una ciudad del interior de la provincia, que es muy distinta a la realidad de la ciudad capital u otro lugar del interior”, señaló.
Con el apoyo de la comunidad y sus colaboradores, incluido un diácono permanente y varios catequistas, la parroquia Santa Catalina continúa su labor pastoral a pesar de este desafortunado incidente.