En una reciente declaración emitida desde la sede gubernamental, el vocero presidencial, Manuel Adorni, ha confirmado que el Gobierno Nacional otorgará un nuevo bono a los jubilados y pensionados durante el próximo mes de junio. Este estímulo, cuyo monto se fija en 70 mil pesos, tiene como objetivo principal salvaguardar el poder adquisitivo de este sector de la población frente al persistente embate inflacionario.
La medida, que busca asegurar que los jubilados no se vean afectados por la escalada de precios, se enmarca dentro de una serie de ajustes y reformas implementadas por el Gobierno en el sistema de seguridad social. Uno de los cambios más significativos es la nueva fórmula de movilidad, estipulada en el Decreto 274/24, que ajusta los haberes según el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Este decreto, que entrará en vigor en julio, ha sido aplicado de manera anticipada por la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) en los meses de abril, mayo y junio, como un adelanto a cuenta del resultado de la fórmula vigente para el mes de junio, según lo establecido por la Ley 27.609. Este adelanto ha resultado en un aumento del 53,91% en el trimestre, superando el 41,48% que se estima para el mes de junio.
En cuanto a los montos concretos, el ajuste del 8,8% en junio se reflejará en los haberes de los jubilados y pensionados, así como en los beneficiarios de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM). Tomando como base las cifras de mayo, se estima que el haber mínimo ascenderá a aproximadamente 206.994,05 pesos, mientras que la PUAM rondará los 165.507,24 pesos.
Además del ajuste por inflación, los beneficiarios recibirán el bono adicional de 70.000 pesos, sumando así un alivio económico significativo para este sector de la población. Es importante tener en cuenta el calendario de pagos establecido por Anses, que se extenderá hasta finales de mayo y que varía según la terminación del número de documento del beneficiario.

