Según el DNU clubes de fútbol podrán convertirse en Sociedades Anónimas Deportivas 


En una reciente medida tomada por el Gobierno Nacional, se dio a conocer un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que introduce cambios significativos en la estructura legal de los clubes de fútbol en el país. El artículo 334 de este DNU modifica la Ley de Sociedades, permitiendo a las instituciones deportivas transformarse en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD).

Esta modificación fue anunciada por el presidente Javier Milei, quien destacó la importancia de la reforma durante una cadena nacional en la que presentó un total de 30 cambios. El punto 27 de estas reformas específicamente aborda la alteración de la ley para brindar a los clubes de fútbol la opción de adoptar la forma jurídica de sociedades anónimas.

En términos concretos, el artículo 334 del DNU realiza ajustes en la Ley de Deportes y define las entidades que serán consideradas como «asociaciones civiles deportivas integrantes del Sistema Institucional del Deporte y la Actividad Física». Dos categorías clave se destacan en esta modificación.

En primer lugar, se incluyen las «personas jurídicas previstas en el artículo 168 del Código Civil y Comercial de la Nación». Estas entidades deben tener como objetivo la práctica, desarrollo, sostenimiento, organización o representación del deporte y la actividad física, de acuerdo con los principios generales enunciados en el Capítulo I de la presente ley, y deben cumplir con las características indicadas en los artículos 20 y 20 bis.

En segundo lugar, se mencionan las «personas jurídicas constituidas como sociedades anónimas reguladas en la Sección V de la Ley N° 19.550 y sus modificatorias». Estas sociedades deben tener como objeto social la práctica, desarrollo, sostenimiento, organización o representación del deporte y la actividad física, también de acuerdo con los principios generales establecidos en el Capítulo I de la ley.

Esta medida representa un cambio significativo en la estructura legal de los clubes de fútbol, abriendo la puerta a nuevas formas de gestión y financiamiento que podrían impactar en la forma en que estas instituciones operan y se desarrollan en el ámbito deportivo.