Silvia Tedesco, Lic. en Fonoaudiología Neurolingüística y especialista en Autismo, habló en Radio TupaMbaé sobre la importancia del diagnóstico y de “la responsabilidad que hay que tener en los medios de comunicación a la hora de hablar de los trastornos del espectro autista (TEA), por respeto a los que lo sufren”.
En primer lugar, la Lic. en Fonoaudiología Neurolingüística, mencionó que resulta imperante que “la gente sepa primero que antes de hablar puntualmente de este tema, son los criterios diagnósticos los que se tienen que tener en cuenta. Porque podemos tener muchas mamás que nos están escuchando y quizás observan algún comportamiento inadecuado de su hijo. Entonces es importante aclarar el diagnóstico”.
En este sentido, Silvia Tedesco explicó: “Cuando hablamos de autismo, estamos hablando de que existe deficiencia persistente en la comunicación social y en la interacción social, en donde hay deficiencia en la reciprocidad socio emocional. A su vez, hay conductas comunicativas no verbales que los chicos utilizan de una manera inadecuada en la interacción, pasando por anomalías de lo que conocemos habitualmente y que tienen que ver con: poco contacto visual, lenguaje corporal deficiente, uso limitado de los gestos y falta de expresión facial”.
“También es necesario que no solo tengan esto del déficit en la comunicación social y en la interacción, sino que es fundamental para el diagnóstico de autismo que presenten patrones restrictivos y repetitivos de comportamientos, intereses y actividades” añadió.
Sobre la “insistencia en la monotonía”, la profesional y especialista en autismo dio ejemplos específicos sobre las actitudes o conductas que presentan las personas con TEA. “Si no me baño a determinada hora lloro, si no como en determinado momento o no voy por la misma calle a la escuela me angustio. O sea, vemos inflexibilidad en los niños y en los adultos con rutinas y patrones ritualizados marcados, es decir falta de espontaneidad”.
“Estos patrones rígidos presentan angustias cuando los padres o en los trabajos a los adultos se les dice: ´no vas a hacer esto tenés que hacer aquello´. Les cuesta el cambio, las transiciones, porque los patrones de pensamientos son rígidos. Puede tener hiper o hiporreactividad a los estímulos sensoriales. Un rasgo no hace a un diagnóstico”, aclaró.
En cuanto a los cambios que ocurren en una persona que le diagnostican autismo, reveló: “Hoy existe un colectivo de mujeres con gran heterogeneidad que cuando se habla autismo en mujeres, se habla de camuflaje de conductas. Y camuflaje de conducta implica la acción que la lleva a camuflar y/o a disfrazar sus dificultades para poder ser aceptadas por iguales. Pero este disfraz provoca un gran agotamiento mental y las lleva a sufrir ansiedad y depresión”.
“Cuando hablamos de autismo existe este gran espectro donde vamos a ver chicos con baja funcionalidad y personas con una alta funcionalidad”.
“Las personas que tienen una alta funcionalidad, pueden camuflar, disfrazar la sintomatología, pero provoca gran agotamiento mental; hay sufrimiento, angustia, y depresión. Existe algo importante también en el diagnóstico, en donde se dan comorbilidades. Y las comorbilidades son, trastornos o algo secundario al diagnóstico primario”.
“Muchas veces en las personas que tienen autismo y tienen un alto funcionamiento o un alto coeficiente intelectual, la inteligencia los ayuda a camuflar, a disfrazar la sintomatología, pero a veces las comorbilidades en la pubertad, en la adolescencia y en la adultez se hacen más visibles”.
En lo que respecta a los casos de autismo en hombres, la profesional indicó: “Se dice que hay cuatro hombres por cada mujer con diagnóstico. Pero para mí, en los últimos congresos se habla de que este camuflaje existe, este colectivo de mujeres que sufre existe; entonces se habla de un infra diagnóstico”.
Además Silvia Tedesco, Lic. en Fonoaudiología Neurolingüística y especialista en Autismo, reiteró que “lo que hay que tener bien en claro es que un rasgo, no hace al diagnóstico”.